Un nuevo informe revela el modo en que los conocimientos climáticos potencian la fiabilidad de la transición hacia las energías renovables
A medida que se acelera la transición mundial hacia las energías renovables, los conocimientos meteorológicos y climáticos son cada vez más importantes para garantizar la fiabilidad y la resiliencia de los sistemas energéticos y contribuir a la planificación de la oferta y la demanda de electricidad, según un nuevo informe.

Tal y como se apunta en la publicación 2023 Year in Review: Climate-driven Global Renewable Energy Potential Resources and Energy Demand (2023 a examen: demanda de energía y recursos energéticos potenciales de carácter renovable a escala mundial fundamentados en información climática), para que el mundo pueda cumplir los objetivos de triplicar la capacidad de las energías renovables y duplicar la eficiencia energética de aquí a 2030 es indispensable contar con matrices energéticas diversificadas que tomen en consideración la información climática.
El informe ha sido elaborado conjuntamente por la Organización Meteorológica Mundial (OMM), la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) y el Servicio de Cambio Climático de Copernicus (C3S), operado por el Centro Europeo de Previsiones Meteorológicas a Plazo Medio (ECMWF).
"Ya se trate de la generación de energía solar en condiciones más secas que la media, de la generación de energía eólica en regiones cuyas condiciones se ven alteradas por el paso de La Niña a El Niño, o de la generación de energía hidroeléctrica en un contexto de fluctuación de las pautas de precipitación, el clima ejerce una influencia directa tanto en la oferta como en la demanda de electricidad. Son retos que, al mismo tiempo, constituyen oportunidades sin precedentes: la integración de los conocimientos climáticos en la planificación energética potencia la fiabilidad de la generación eléctrica, ayuda a anticipar los picos estacionales de demanda y refuerza la capacidad de adaptación de las infraestructuras del futuro", se apunta en la publicación.
El informe se centra en 2023, año en el que se produjo la transición de un episodio de La Niña a un episodio de El Niño, con las consiguientes alteraciones en variables climáticas clave para el sector energético como la velocidad del viento, la radiación solar, las precipitaciones y la temperatura. También fue el año más cálido del que se tenía constancia hasta la fecha, un récord que volvió a batirse en 2024.
El informe se ha publicado en vísperas del Foro Mundial Energía Sostenible para Todos, que se celebrará en Barbados los días 12 y 13 de marzo.